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Quién nos lo iba a decir hace unas semanas que ahora estaríamos confinados/as, cada uno/a en su casa, con un futuro incierto por delante, viviendo el presente como no lo habíamos hecho en tiempo, haciendo “F5 actualizar” casi a cada hora…

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Normalmente vamos más bien programados/as con nuestro guión del día, con todo más o menos planeado y dispuestos/as a hacer lo que nos habíamos asignado. Quejándonos por el estrés que esto supone, eso sí, pero en acción constante, dentro de nuestra zona de control y/o conocida.

Y de golpe es como si nos hubieran agarrado y nos hubieran colocado en un escenario totalmente nuevo. Y las emociones aparecen, nos avisan, nos hacen estar en alerta. Y, bienvenidas sean, ya que nos pueden ayudar a irnos adaptando a cada situación. La clave está en tenerlas de aliadas y no dejarnos arrastrar por ellas. Por tanto, nos ayudará a gestionar la situación escucharnos, darnos permiso para sentir, para darles una salida y entender su mensaje.

¿He sentido o estoy sintiendo miedo estos días? ¿Qué es lo que me da miedo exactamente? Contagiarme de la enfermedad? ¿Que se contagien las personas que quiero? La incertidumbre laboral? Podré estar tantos días en casa sin salir? ¿Podremos sostener la convivencia familiar? ¿Me puedo sentir solo/a? ¿Podré tener todo lo que necesito? ¿Se me acabará el papel higiénico? (de acuerdo esta última es para quitar un poco de hierro 😉).

“Una de les preguntas que nos pueden ayudar, para empezar,
es tener claro qué cosas dependen de mí y cuáles no.”

Es importante, pues, que no nos dé miedo escucharnos, valga la redundancia. Saber exactamente qué me está pasando, para que de esta manera pueda ir encontrando una salida, transformando estos miedos en zonas de crecimiento. Cuando nos encontramos en una situación nueva, podemos quedarnos bloqueados/as pero también podemos descubrir recursos que ni sabíamos quizás que teníamos dentro de nosotros/as.

El miedo en sí mismo no es bueno ni malo. Su función es avisarnos para que nos preparemos o estemos alerta, para que no seamos personas temerarias. Aparece cuando algo nos importa y lo queremos mantener o conseguir. Su mensaje es: esto es importante para ti, ¿ya tienes los recursos que necesitas para hacerle frente?

Y ahora mismo se han agrupado muchas cosas que son importantes en mayor o menor medida para todos/as nosotros/as: Salud, Trabajo, Dinero, Amor. Todo en un solo pack. El reto está servido. Tendremos que arremangarnos y mirar por dónde empezamos a gestionarlo.

¿Qué depende de mí y qué no?

Una de las preguntas que nos pueden ayudar, para empezar, es tener claro qué cosas dependen de mí y cuáles no. En este caso, nos encontramos con una situación donde la sensación de no control es muy grande: el virus, las decisiones de las administraciones públicas, el mundo laboral… Es lógico que en un primer momento nos podamos sentir bastante desamparados/as.

¿Cómo queremos pasar por esta situación?

Pero hay algo que depende totalmente de nosotros/as, y es cómo queremos vivirlo. Que dependa de nosotros/as no quiere decir que sea fácil de manejar. Pero está a nuestro alcance buscar todos los recursos que nos pueden permitir vivir esta situación de incertidumbre, sintiéndonos protagonistas de cómo queremos pasar por ella.

¿Qué quiero alimentar, el pánico o la confianza?

Si quiero alimentar la confianza, ¿qué me puede ayudar? A través de las preguntas podemos ir haciendo nuestro propio camino, vamos dejando las migas de pan para no perdernos. Muchas respuestas están dentro de nosotros/as.

¿Qué me puede ayudar a sentirme mejor?

Qué cosas puedo hacer para sentirme más protegida? Con quién tengo ganas de seguir manteniendo el contacto, aunque sea virtual? Qué fugas de energía quiero evitar? ¿Cuáles son mis fuentes de energía?

Desde El despertador queremos acompañarte en este viaje no elegido pero en el que estamos todos/as inmersos/as. Porque a pesar de que estemos confinados/as no estamos solos/as e, incluso, podemos conseguir sentir más unión como comunidad. Queremos crecer juntos/as en este reto que tenemos entre manos.

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Un artículo de Anna Soriano,
psicóloga, coach y co-directora de El despertador,
formadora en ecología emocional, gestión del cambio
y desarrollo competencial

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Una conversación sobre las emociones con Anna Soriano,
psicóloga y experta en Ecología Emocional,
y Jordi Muñoz, coach y musicoterapeuta (vídeo).

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